viernes, 5 de mayo de 2017

CRÓNICA DE LA 1ª CHARLA (“EL TERUEL INTERIOR COMO PARTE DE LA ESPAÑA VACÍA”)





 Gonzalo Tena Gómez*


Debutaba en el ruedo de la Cámara de Comercio, el madrileño afincado en Zaragoza, Sergio del Molino, tomando la alternativa de manos del diestro poeta de la tierra, El Hijarano, y despachando al morlaco “Literario” con una faena voluntariosa. Completaba la terna nuestro solvente veterano José Manuel Nicolau, “El del Agua Azul” que se lució con el capote ecológico.
Pero dejémosnos de coñas taurinas y vayamos al grano sintético del asunto.
Tras las presentaciones pertinentes, Víctor Guíu introdujo la sesión indicando que el “Gran Trauma” del éxodo rural tiene sendas lecturas: la de la persona que no ha abandonado su pueblo y la del urbanita.
Sergio del Molino (a partir de ahora, SdM) se reconoció lector de su propio libro, que no tiene tintes políticos ni académicos ni pretende ofrecer soluciones, sino que se trata de un ejercicio literario escrito desde la perspectiva del flâneur (paseante observador), que pretende comprobar cuáles de sus intuiciones son certezas. Recalcó la extrañeza de la “España vacía” (el 53% de su territorio alberga una bajísima densidad de población, “el mejor territorio para comunicarse con los dioses”, según Estrabón) en el contexto de Europa occidental, en el cual se da un hábitat disperso continuado donde suelen cobijarse escritores y artistas. SdM aludió a las catarsis que se producían en el turno de palabras de las presentaciones itinerantes de su libro, cuando las personas se expresaban con gran vehemencia.
José Manuel Nicolau (en la continuación, JMN), desde una perspectiva científico-ecológica y experiencia en territorios despoblados, nos recordó que la naturaleza está en cambio por el despoblamiento, ganando funcionalidad; el medio urbano soporta una crisis ambiental; en el agro, la agricultura y la ganadería intensiva generan serios problemas ecológicos;  el monte está en proceso de recuperación de la vegetación (naturalización o “asilvestramiento”). Nos dio a conocer la metáfora de “montes vestidos” y el vocablo “matorralización”, fenómeno que se está produciendo en las estepas. Proliferan algunas especies de fauna salvaje voluminosa: cabras, corzos, ciervos, jabalíes, en espera del lobo depredador. El caudal de los ríos ha experimentado un descenso del 20% por el consumo de agua de la vegetación,  se secan algunas fuentes y se producen incendios más devastadores. Se hace necesario que gente que viva en el medio rural gestione estos cambios naturales.
JMN hizo mención de las consecuencias económicas de la despoblación, del bienestar que nos proporciona la Naturaleza, ignorado por la alienación ecológica urbanita (¿quién se cuestiona la procedencia del oxígeno que respiramos, el origen del agua que bebemos y el de los medicamentos?)
A este respecto, SdM nos contó que había conocido en China a un antropólogo farmacéutico que había contactado con un chamán para obtener una planta antitumoral.  Abogó por la conexión entre la cultura oriental  y la nuestra.
JMN elogió al movimiento ecologista, dijo que España es la Reserva Natural de Europa y abogó por la implementación del I+d+i (investigación, desarrollo e innovación) en el medio rural. A continuación trajo a colación el tema del arraigo, atávico y emocional, adaptativo en origen (para SdM, paradójico y glorificado por la cultura pop: “nada es inmutable y el arraigo te liga a algo que percibes inmutable”). JMN añadió que la emigración es ancestral y que la individualidad es un invento de la Revolución Francesa.
SdM afirmó que la comunidad ya no existe en la ruralidad; sí los geriátricos. Agricultores de Guadalajara, residentes en la ciudad, se desplazan 50 km para trabajar.
Víctor Guíu aludió a la “despoblación cultural”, asumida por los adolescentes. En Zaragoza se organizan excursiones escolares a Puerto Venecia (shopping resort). Criticó las soluciones políticas que se están dando: circuito de automovilismo, autovías, etc.
SdM, que fue periodista del Heraldo de Aragón durante 10 años, dijo que el desarrollismo propugnado por Joaquín Costa hoy no es válido. El AVE vacía el espacio intermedio.
JMN recordó que en Sollavientos debatimos sobre proyectos. El medio rural necesita ayuda externa, también dinero e imaginación. Y que debe replantearse el modelo de poblamiento.
SdM propone exigir una administración pulcra y precisa. Recuerda que J. Clos, ex alcalde de Barcelona, decía que el mundo rural no se puede sostener sin una renta per cápita general elevada.
Comienza el  turno de palabras para los asistentes, quizá demasiado breve. Se apunta hacia el juego de los políticos a la contra del medio rural. SdM cuenta que en Escocia existen planes efectivos de recuperación de pueblos. Afirma que el relevo generacional puede ser inmigrante.
JMN echa en falta la autocrítica del medio rural, desestructurado e incapaz de tomar decisiones sobre proyectos económicos.
Lucía Pérez defiende unas buenas infraestructuras y que se cuente con la gente de los pueblos. Cita una experiencia de desarrollo integral del valle del Nansa que está asentando población. Recuerda que los pobladores están guardando los pueblos.
El presidente de “Mijares Vivo” (Olba), presenta su asociación y nos dice que han constituido un grupo de Custodia del Territorio.
José Luis Simón califica el libro “La España Vacía…” como demoledor, cargado de frases negativas (“no tiene presente ni futuro…”), que quita las expectativas de autoestima de los habitantes rurales, que no están amargados. SdM se toma el envite como un elogio, por no haber despertado indiferencia y reconoce su tendencia “a ser cenizo”.
JMN reivindica la necesidad de un elogio de la vida rural (quizá una actualización del de fray Luis de León: “Qué descansada vida la del  que huye del mundanal ruïdo…”).
Otra persona, habitante de un pueblo de 1000 almas, denuncia la promoción del consumo y la concentración de la gente. SdM alude a los flujos capitalistas.
Otra voz, ligada a la librería Senda, se refiere a las sensaciones de las capitales pequeñas. SdM apunta que, incluso Salamanca, tiene poco poder demográfico.
Nueva intervención femenina concerniente al envejecimiento de la población y a la denostación y la mitificación de los pueblos. La administración electrónica podría vaciar más las zonas rurales. SdM aboga por la consecución de la banda ancha de internet.
Begoña Sierra, haciendo honor a su apellido, y su amiga, viven en Moscardón (40 habitantes). A pesar de quejarse de la administración y los servicios, reconoce vivir bien y propone hacer el medio rural atractivo. Le duele el calificativo de “vacía”. Inicia alusiones a los periodistas.
SdM dice que el periodismo conforma prejuicios y elogia los periodistas locales y de provincias.
Lluís Rajadell, del Heraldo  de A. denuncia que se les tilde de “banda de llorones y pedigüeños”.
 
Poco más. Víctor despide el acto  con petición de un aplauso (cumplida) y con “si se nos cae la casa, se vuelve a levantar”.
Nadie salió a hombros del salón.


 *Colectivo Sollavientos





1 comentario:

Anónimo dijo...

Gracias por levantar acta del acto. Escribir siempre es un acto contra el olvido.
Después de todas las intervenciones de la mesa sabía que iba a faltar tiempo para las del público. Así fue. Hubo pocas y las respuestas del autor excesivamente largas, con mínima autocrítica.
Ese es su libro y su visión. Comparto algunas cosas y discrepo en bastantes.
Creo que es una visión incompleta y urbanita.
He leido estos días "Los últimos" de Paco Cerdá. Lo he encontrado delicioso y cercano; creo que refleja mejor ese pais menos poblado, no vacio.
Saludos

ARBU