Transcribimos la Carta al Director, publicado en el Diario de Teruel de hoy 23 de octubre de 2008, y la contestación inmediata que desde el Colectivo Sollavientos queremos hacerle llegar.
Riámonos de nuestra propia desgraciaHe tardado un tiempo en darme cuenta de que todo cuanto han escrito distintas personas y colectivos, lejos de ir en contra nuestra son los que velan por nuestro futuro y bienestar. A veces me he enfadado mucho, pero creo que hice mal. Todos abogan por no estropear el medio ambiente y conservar unos cuantos animales (que yo, nisiquiera sabía que existian), en pro de nuestra salud.
¿Cómo no nos habíamos dado cuenta de que la piscifactoría era un peligro y un atentado contra nosotros? Gracias a estas personas, y antes de que sea demasiado tarde, "he comprobado" que tienen razon. Ahora ya estoy tranquila, porque gracias a estas personas y colectivos se va a cerrar, y con ello se acabó el peligro y la intranquilidad de tantos como han estado preocupados porque siguiera adelante.
A los políticos les doy las gracias porque no merece la pena conservar unos puestos de trabajo en un pueblo. Total son once y alguno más que se hubiera creado con el aprovechamiento del CO2. (Eso qué es comparado con los que se van a crean en ese grandioso proyecto de casinos y cosas por el estilo que se van a hacer).
Por otro lado, tampoco importa que se cierre la tienda que con tanta ilusion hemos acogido, al fin y al cabo como quedaremos unos pocos abuelos, con los cangrejos y algún pez que otro podremos sobrevivir.
La gasolinera, ¡qué más da! El que tiene coche puede ir a echar gasolina a otro sitio, y el que no, pues no la necesita.
El estanco, ¡qué disparate! El tabaco mata ¿Cómo se te ocurre Juan Carlos cometer semejante atentado contra la salud de la gente de este pueblo?
Centro de Salud y Farmacia, ¡qué mas da! Si los abuelos no necesitamos de dichos establecimientos.
Registro y Notaria, ¡qué más da! Lo tenemos todo arreglado y si no, alguien nos llevara a los ancianos donde lo haya.
¡Qué decir del Parque Geologico! Una maravilla que Dios y la naturaleza nos ha regalado. ¡Por favor!, eso sí que no quiero que se lo lleven, dejemos que vengan a visitarlo con orden y pidiendo cita, ya que es tal la afluencia de gente que podrían encontrarse con no poder verlo el día que deseen.
Bueno, se salva el restaurante y quizás un bar, porque igual que viene alguien de vez en cuando a respirar aire puro pueden entrar a comer o tomarse un café. Por lo demás, poca cosa hay, albañiles, carpinteros, fontanero... ¡Qué más da, son unos pocos!
Y nada más, agradecer de nuevo "a nuestros salvadores" sus desvelos, pero no sin antes recordarles que "hay amores que matan".
Aurora J. Navarro Cerra. Aliaga
Contestación del Colectivo Sollavientos
a Aurora Navarro Cerra
Hola, Aurora.
Desde que hacía redacciones en el colegio, la metáfora y la ironía no son lo mío. No entiendo muy bien lo que quieres decir en tu carta que hoy publica el Diario de Teruel:
- “Gracias a estas personas y colectivos se va a cerrar la piscifactoría (supongo que te refieres a la central eléctrica)”: ¿significa que unos “particulares” somos los causantes de que se cierre?
- “Tampoco importa que se cierre la tienda”: ¿significa que se va a cerrar también la tienda y que nosotros somos los causantes?
- ¿Quieres decir que se van a cerrar también la gasolinera, el estanco, la Notaría, el Registro de la Propiedad, el Centro de Salud y la Farmacia y va a ser por nuestra culpa?
- ¿Quieres decir que, agazapados detrás del Parque Geológico, amenazamos de paso a los albañiles, carpinteros y fontaneros?
- ¿Quieres decir todo eso? Es que no lo entiendo muy bien.
Colectivo Sollavientos